miércoles, 9 de febrero de 2011

RESUMEN GERENCIAL DE LA OBRA "LA TERCERA OLA" - AUTOR ALVIN TOFFLER

LIC. EDITH OLIVARES MANRIQUE
MAESTRÍA EN DOCENCIA UNIVERSITARIA – UCV

“La tercera ola”, es una obra que consta de 25 capítulos, se basa en la historia de la humanidad, que pasa por transformaciones profundas de índole económica, social, política y cultural, desencadenándose enfrentamientos por nuevos paradigmas.
La primera ola representa a la sociedad agrícola (desde el año 8000 a.C. hasta el siglo XVII), en ella nace la agricultura, la ganadería y los primeros tejidos, superando la pesca y la caza, con ella surgen el comercio y las primeras aldeas, la navegación y la edificación, el hombre cambia su condición de nómada a sedentario y comienza el crecimiento demográfico. La unidad económica era pequeña y autosuficiente; generalmente era la familia, que vivía de lo que cultivaba en los campos y el feudo. La única fuente de energía era el esfuerzo físico humano y se aprovechaba en forma primitiva de fenómenos naturales como la lluvia, el viento y el sol. En esa época existían escribas y mensajeros que se dirigía hacia una zona para obtener información y llevarla hacia otra.
La segunda ola representa a la sociedad de la revolución industrial. Esta revolución cambia la forma de producir bienes y la forma de organización del mundo. El desarrollo de las nuevas tecnologías creó gigantescas máquinas electromecánicas. Se creó la máquina de vapor y la imprenta que reemplazaron el trabajo manual. Con la invención de la imprenta surgen el periódico y los medios de comunicación masiva, entre ellos la radio y la televisión. Por ende, surgen enormes centros urbanos acentuándose el crecimiento demográfico, se intensifican los medios de comunicación gracias al ferrocarril, el automóvil, el barco a vapor; así también nace la explotación de recursos naturales como fuente de energía o materia prima. La producción y distribución de bienes y de información pasan a ser masiva.
La sociedad de la segunda ola se divide entre productores y consumidores. Enormes fábricas se dedican a elaborar bienes para consumidores inconscientes de su mecanismo de obtención. La producción es masiva y en serie. Masiva porque existieron una o varias máquinas para hacer un solo tipo de producto durante un tiempo indeterminado. En serie porque se divide cada parte del proceso de fabricación y se realiza repetidamente. La unidad económica es grandes organizaciones con enormes cantidades de capital para invertir en industrias y el comercio. Este esquema productivo generó el trabajo por jornada dentro de un horario determinado. La extensa familia antigua se reduce a la familia nuclear: mamá, papá e hijos. Surgen las escuelas y se impone características propias de la vida industrial: puntualidad, uniformización, sincronización, masificación, centralización, obediencia y trabajo repetitivo. La energía de la segunda ola depende de fuentes no renovables, generalmente de origen mineral como: el carbón, el petróleo y la energía nuclear.
La tercera ola representa la sociedad del conocimiento, de la información, que rompe los paradigmas que la segunda ola nos impuso. Esta se caracteriza por la descentralización, desmasificación y la personalización. La producción en serie es complementada con la producción en series cortas. La producción ya no se dedica a hacer decenas de miles de un único producto, sino cientos de ejemplares de cientos de productos. Se amplifica la fuerza mental del ser humano. Los sistemas cibernéticos, computadoras, sistemas de comunicación, internet, etc., funciona como amplificadores de la fuerza mental en un mundo globalizado.
Aparecen diversos tipos de familias, monoparentales, unipersonales, convivencia estable entre amigos, convivencia entre personas del sexo opuesto, familias hijo – madres – abuela, familias hijo – madre – tía, etc. Nace la cultura “sin hijos”. El trabajo infantil se intensifica más, pues se cree que jóvenes de 14 años son mejor calificados para vender computadoras que muchos adultos. Un mal a combatir es la soledad por la deshumanización y por el enfoque del hombre – computadora, de allí que se acrecentará el suicidio por la falta de relacionarse con los demás. Los medios de comunicación se van desmasificando, aparecen revistas especializadas en temas específicos, numerosos canales de televisión por cable y satélite y la capacidad de las computadoras de comunicarse, hacen que la comunicación esté personalizada y que el consumidor ya no se limite a tomarla “tal cual viene”. Ahora el espectador puede intervenir en los diarios que lee y en los programas de televisión que mira.
En este libro Toffler analiza las relaciones entre las guerras y una sociedad cambiante por la ruptura de paradigmas en todos los aspectos de la vida social, política, económica y cultural.

No hay comentarios:

Publicar un comentario